lunes, 24 de agosto de 2020

La furia del invierno

 Hay una furia que se hace blanda y aterciopelada

Una furia casi inofensiva,

de ternura no intencional

Como grito de garganta irritando mis pensamientos

A veces se hace fuerte y me golpea,

me lastima y muestra sus venas


Sangro con la noche,

arrancándome el pecho

el sentimiento esclavizado,

condenado a no invadirme


A veces no quiero darle la espalda

a las posibilidades.

Pero estoy en estado de vigilia,

y mis propósitos están en estado vegetativo,

en constante degradación

Ya no te creo


Imperio de la vergüenza conservada en el interior

Las montañas gritan con la furia del invierno,

ese invierno frío que congeló mis sentimientos